Uno de esos
testigos históricos que conforma la ciudad de los Cerros, es la Ilustre Iglesia
de San Lorenzo. Sus muros también descubren otros aspectos desconocidos que a
simple vista no observamos, la memoria de un pueblo; la crónica de las
grandezas y miserias de una ciudad.
San Lorenzo, en su renacentista
interior conserva en muy mal estado la barroca cúpula de la capilla mayor, la
clasicista portada de ingreso a la sacristía, el coro mudéjar de madera
policromada y numerosas e interesantes capillas platerescas pertenecientes a
los linajes de los Arredondo, los Peñuela, los Medina y los Dávalos.
Según mi opinión,
se debería costear dos imágenes, una imagen de piedra del santo mártir iría a
la hornacina de la puerta principal del
templo y otra imagen se instalaría en la renacentista ventana de la fachada principal
que da a la capilla mayor y que actualmente se oculta tras la hiedra de la
espadaña. A esta imagen se le daría culto y el día de San Lorenzo, se
realizaría una esplendorosa procesión con la imagen por el barrio de San
Lorenzo, así como una misa en la puerta principal del templo. Y por último, si
alguna vez se restaurase el interior de la iglesia, posteriormente en vez de
abrirla al culto, museal izarla sería lo
más apropiado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario