‘San Lorenzo, abierto por obras’

‘San Lorenzo, abierto por obras’

Lunes, 29 de Julio de 2013 12:08 Alberto Román Vílchez

Estado actual del interior de San Lorenzo. FOTO FUNDACIÓN HUERTA DE SAN ANTONIOConcretando asuntos y cumpliendo compromisos. La Fundación Huerta de San Antonio, que se hará cargo de la restauración de San Lorenzo tras firmar con el Obispado de Jaén un convenio de cesión de la iglesia para darle un uso social y cultural, dará a conocer en breve el proyecto de rehabilitación del inmueble. Y además, ha previsto una jornada de puertas abiertas para que todo el que lo desee pueda conocer el interior del templo y su estado actual.
Será a través de dos actos programados con motivo de las fiestas anuales del barrio de San Lorenzo, previstas el segundo fin de semana de agosto. Por un lado, el viernes día 9, a partir de las diez de la noche, el arquitecto ubetense José María Martos Leiva dará todos los detalles del proyecto de rehabilitación estructural urgente del edificio, que ya está ultimado y a la espera de los últimos trámites para que puedan comenzar las obras.
Y al día siguiente, el sábado 10 de agosto (festividad de San Lorenzo) y bajo el título 'San Lorenzo. Abierto por obras', habrá una serie de visitas guiadas al interior del templo, dirigidas a grupos reducidos y totalmente gratuitas. La idea inicial es realizar tres recorridos por la mañana y otros tres por la tarde, aunque si hubiera mucha demanda quizá se repitan el domingo. Y para participar será preciso reservar previamente, mediante una inscripción que podrá hacerse directamente en la barra instalada ante la Casa de las Torres con motivo de las fiestas de la barriada.
Está por concretar qué se podrá ver durante la visita, pues la situación del templo no permite un recorrido interior extenso. Dado que las circunstancias impiden crear un circuito, como mínimo se habilitará un pasillo desde la puerta a la nave principal, con un círculo en el centro desde el que se darán las explicaciones. Quien esté interesado en visualizar otras estancias y detalles de la iglesia, podrá hacerlo el día anterior durante la exposición del arquitecto, pues se prevé proyectar mucho material gráfico.
Vista de las cubiertas de San Lorenzo. FOTO TOPOSUR
Estas propuestas han sido organizadas por la Asociación Cultural Mirador de San Lorenzo como parte de las fiestas de su barriada, contando con la colaboración de la Fundación Huerta de San Antonio y la empresa de servicios turísticos Artificis que dirigirá las visitas.
Participación e información
Con estas dos citas, la Fundación Huerta de San Antonio cumple su compromiso de dar participación e información a la ciudadanía, empezando por las gentes del barrio y terminando por cualquier persona interesada en el tema, sobre todo lo que pretende llevar a cabo en San Lorenzo. El presidente de la entidad, Nicolás Berlanga, ya declaró en su día que la intención es que el edificio esté abierto desde el principio y se convierta en un centro vivo.
La idea es que las obras puedan comenzar en agosto o, como muy tarde, en septiembre, toda vez que el proyecto está prácticamente acabado y ya se han realizado algunos trámites ante Cultura, llegándose a un acuerdo. Los plazos se van cumpliendo y en breve estará en manos del Obispado que, tal y como figura en el convenio firmado por ambas partes, en estas actuaciones de urgencia deberá igualar la inversión que haga la fundación.
Deterioro por semanas
Todos los implicados tienen asumido que hay que intervenir cuanto antes ya que la situación del templo así lo requiere. Tantos años de abandono y de un mínimo mantenimiento han hecho mella en el edificio, cuyo deterioro se puede palpar por semanas. Así lo han manifestado algunas personas que están realizando allí diferentes trabajos de campo de de documentación, quienes aseguran que entre unas visitas y otras perciben los cambios.
Logotipo de la fundación diseñado por Artifactum.Paralelamente, la Fundación Huerta de San Antonio está preparando un completo dossier histórico sobre San Lorenzo, recopilando todos los datos a su alcance que ayuden a disponer de una historia del edificio lo más completa posible. No está siendo tarea fácil pues, a diferencia de otros edificios y monumentos de la ciudad, nadie ha estudiado San Lorenzo profundamente, y no hay mucha documentación fiable al respecto.
No obstante, están apareciendo datos curiosos, como que ya en 1835 había protestas ante el Obispado pidiendo que el templo fuera arreglado, o que los problemas han sido una constante en el edificio, en el que ha habido obras casi permanentes a lo largo de su historia. Añadir que la fundación ya tiene un logotipo diseñado por Nono Sánchez (del estudio Artifactum) en el que San Lorenzo es parte central.
Un año de obras
La hoja de ruta marcada el pasado 14 de mayo, día de la firma del convenio, para garantizar un futuro a la iglesia de San Lorenzo, concreta que cuando haya luz verde desde todos los frentes, se prevé un año para acometer las obras, tiempo durante el cual se reflexionará sobre la utilización posterior del edificio. Con su conclusión comenzará a contar la cesión del Obispado, programada por 50 años renovables por periodos de 10 años de mutuo acuerdo entre ambas partes.
La idea es consolidar las cubiertas y los muros, para que a partir de ahí lo que haya que hacer sea mejorar el interior, diseñar de una manera gradual las cosas a realizar. «Si tenemos la estructura consolidada, la nave ya se podrá empezar a utilizar. Incluso estará muy bien dar ese mensaje para que la gente se apropie del proyecto. No vamos a esperar a que todo esté reluciente y terminado para comenzar a darle vida. Hay que dársela lo antes posible», manifestó en su día Nicolás Berlanga en una entrevista concedida a IDEAL.

Y a los 77 años Miguel Ángel resucitó NATIVIDAD PULIDO / MADRID Día 10/07/2013 - 19.20h Restituyen en Florencia un «San Juan Bautista» del maestro, destrozado en 1936, durante la Guerra Civil, en la Capilla del Salvador de Úbeda

Y a los 77 años Miguel Ángel resucitó

NATIVIDAD PULIDO / MADRID

Día 10/07/2013 - 19.20h

Restituyen en Florencia un «San Juan Bautista» del maestro, destrozado en 1936, durante la Guerra Civil, en la Capilla del Salvador de Úbeda

 

No todos los días podemos presumir de que una escultura de Miguel Ángel forme parte del patrimonio artístico español. En 1936, la Guerra Civil española no solo segó miles de vidas; también el arte fue víctima de la barbarie. El 26 de julio hubo un asalto a la Capilla del Salvador de Úbeda (Jaén), reconvertida en garaje. Cuentan que fue obra de la Sección Ferroviaria de Linares de la CNT. Sea verdad o no, algunas de las joyas que atesoraba en su interior fueron destruidas: es el caso de un retablo de Berruguete (fue arrancado y quemado; sólo se salvó la figura del Salvador, que no lograron tumbar).

F. CASA DUCAL DE MEDINACELI

Fragmento de la cabeza antes de su limpieza

También se hallaba allí una escultura de 1,3 metros que representaba a San Juan Bautista niño. No tuvieron piedad con ella: la destrozaron. Solo se han conservado 17 fragmentos, entre ellos un trozo de la cabeza, que fue arrojada a una hoguera. El mármol de Carrara del que estaba hecho quedó ennegrecido irreversiblemente. Esa escultura fue modelada por Miguel Ángel Buonarroti, que es como decir que fue esculpida por Dios. Pero la guerra no entiende de genios...

Restitución, no reproducción

F. CASA DUCAL DE MEDINACELI

Los 17 fragmentos recuperados

En 1994 los 17 fragmentos viajaron hasta Florencia. Los depositó allí la Fundación Casa Ducal de Medinaceli, que preside Ignacio Medina, duque de Segorbe. Su destino: el prestigioso Opificio delle Pietre Dure, única institución capaz de obrar un milagro de tal envergadura. Diecienueve años llevan allí los restos. Durante los diecisiete primeros no se tocaron –la restauración sólo se realizó en el último año y medio–: en ese tiempo se llevó a cabo una ardua y exhaustiva labor de investigación y se buscó la metodología de trabajo precisa, que presentaba no pocas complejidades técnicas.

Cita Juan Manuel Albendea, director general de la Fundación Casa Ducal de Medinaceli, un ejemplo: había que crear las piernas de un material moderno que aguantara el peso de los fragmentos originales: solo la cadera (la zona mejor conservada) pesa 50 kilos; a ellos habría que sumar 30 más, los que pesaban los restos del busto y la cabeza. Las partes nuevas no serían de mármol. Era preciso distinguir lo que es original y lo que no. Porque lo tienen claro: esto ha sido una restitución fiel de la obra de Miguel Ángel, no una reproducción, un falso histórico.

Reconstrucción volumétrica en 3D

A partir de 17 fotografías antiguas, rescatadas de archivos de todo el mundo, se logró tener una vista de la escultura desde casi todos los ángulos, lo cual permitió la reconstrucción volumétrica en 3D de la pieza: se sabía con total exactitud dónde debía ir cada fragmento conservado y dónde las piezas nuevas. Realizadas en plexiglás y resina, en su interior tienen una estructura de acero inoxidable. Incluso se previó que en un futuro pudiera aparecer algún nuevo fragmento: el proceso es reversible, pues el montaje de la escultura se ha hecho con imanes. Finalmente, se limpiaron los fragmentos originales con láser. ¿Hay esperanza de que aparezcan más fragmentos? «El desbarajuste de la Guerra Civil fue tal que mucha gente pudo coger piezas. Otra cosa es que se conserven. Es posible que quien las tenga ni siquiera lo sepa», explica Albendea.

Los días 24 y 25 de junio se celebró en Florencia un congreso internacional bajo el título «Il San Giovannino di Ubeda restituito» para presentar las conclusiones de los trabajos de restitución de esta escultura. Tras explicar la metodología aplicada, se expuso la teoría de su atribución a Miguel Ángel. Ya lo hizo en 1930 Manuel Gómez Moreno, pero sin demasiado rigor metodológico. «No basta con decir que es de Miguel Ángel. Hay que demostrarlo», advierte Albendea.

El «San Giovannino mediceo» perdido

Quien sí tuvo rigor metodológico de sobra fue Francesco Caglioti, catedrático de la Universidad Federico II de Nápoles. Autor de un pormenorizado estudio de la escultura durante 12 años, concluye que el «San Juan Bautista niño» de Úbeda es en realidad el «San Giovannino mediceo» del que Vasari habla, pero se creía perdido. Para su autoría se basó en el análisis y comparación estilística con la obra juvenil de Miguel Ángel; especialmente, con obras como «Bacchus» y la «Madonna de Manchester».

La data hacia 1495-96. Apenas tenía 20 años. Aún no había hecho las esculturas que le harían inmortal:el «David», la «Piedad», el «Moisés»... Además, Caglioti dio con la pista de cómo llegó la escultura a Úbeda a manos de Francisco de los Cobos, secretario de Carlos V. «Quien quiera rebatir a Caglioti, va a necesitar mucho tiempo», advierte Albendea. ¿Cómo se han financiado los trabajos de esta restitución? «Gracias a un fondo del Gobierno italiano para restaurar obras dañadas en conflictos civiles; la Fundación ha contribuido en algunas cuestiones». No sabe cuánto ha costado:«Habrá sido mucho dinero». ¿En cuánto podría estar valorada hoy? «No hay ninguna intención de venderla».

La escultura está expuesta al público este mes en el Opificio delle Pietre Dure. En septiembre irá a la catedral de Bolonia y en octubre al Palazzo Grimani de Venecia. En diciembre regresará a casa, a Úbeda. Una parte de la Capilla del Salvador se adaptará como museo: albergará obras que sobrevivieron a la Guerra Civil: el «San Juan Bautista niño», un cáliz de oro de Carlos V, un arca veneciana, la reproducción del retablo de Berruguete... Mientras tanto, podría exponerse en algún museo público.

Los sucesivos propietarios de la obra

N. P. MADRID

La escultura fue encargada a Miguel Ángel en 1495 por Lorenzo de Pierfrancesco de Médicis, «Il Popolano». Se hallaba en la residencia de esta rama menor de los Médicis (los Popolani) al menos hasta 1537. El patrimonio familiar pasó de manos de Lorenzino (huyó de Florencia tras asesinar al duque Alessandro) a Cosimo I. Se ha encontrado un documento en el que consta que en 1537 se envió, vía Cartagena, una «statua molto preziosa» a Francisco de los Cobos, secretario imperial de Carlos V –estuvo 40 años junto a él–, quien había empezado a erigir su panteón en Úbeda, su villa natal. En 1547 este «San Juan Bautista niño» aparece documentado en el inventario post-mortem de Francisco de los Cobos. Gran coleccionista, introdujo a Tiziano en la Corte de Carlos V y recibió importantes regalos de los príncipes italianos, como una «Piedad» de Sebastiano del Piombo.